De acuerdo a la clase del martes 6 de noviembre logro rescatar distintos fragmentos de la exposición de la profesora proveniente de la Universidad de Santiago. Considero que los factores de los cuales ella expuso que resultan relevantes para nosotros se encuentra el hecho de aceptar el consumo de alcohol en el interior de las facultades, pero mantener un cierto control sobre ellos, ya sea otorgando determinados lugares para tal uso o una vigilancia mayor, la cual evite actos delincuenciales o peleas que puedan desencadenar serios daños a los mismos estudiantes, personalmente me he encontrado en los lugares que se analizaron al interior de la USACH y considero que se ha manejado el problema dentro de los parámetros y recursos que manejan, la dificultad radica en el control sobre espacios que poseen dimensiones casi comunales, en la cual la escala humana se pierde y comienzan a ser tierras de nadie. Para ejemplificar esto podría hacer referencia de los estadios, parques, etc.
Me siento convencido en que el carrete como ahí lo denominaron, presenta varios aspectos negativos por los consumos en exceso, pero como un momento de interacción social se presenta muy enriquecedor, es una instancia de comunicación fuera de las aulas en la que los alumnos cambian su posición frente al resto y pueden generar lazos que inclusive podrían ser mucho mas fructíferos que algunas clases.
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